Neuroeducación

La aportación de las neurociencias  en la educación ha sido fundamental para que el docente entienda y comprenda  las particularidades del cerebro y sistema nervioso central, y a la vez relacione este conocimiento con el comportamiento de sus alumnos, su propuesta de aprendizaje, su actitud, el ambiente en el aula, esto es necesario para lograr una innovación pedagógica y a su vez una transformación en el sistema educativo. 

Hoy en día existe un rezago importante en el sistema educativo a nivel nacional y mundial, debido a las políticas educativas, la actualización de los planes de estudio,  la insuficiente infraestructura de las escuelas, el nulo o limitado apoyo  del gobierno a la educación e investigación entre otros.  En la actualidad los niños salen de la escuela con carencias en las competencias, capacidades y habilidades en relación a la lectura, la escritura y cálculo. Y con respecto a los adolescentes y adultos la educación es limitada y deficiente. Por otro lado la escasez de educadores calificados es uno de los más grandes desafíos, para el fortalecimiento de la calidad educativa.  

El proceso de desarrollo cerebral es gradual por ello, la propuesta de aprendizaje debe ir de lo simple y concreto a lo más abstracto y complejo. Entender este proceso es esencial para replantear la propuesta curricular y estilo de aprendizaje en el aula, considerando el nivel de madurez de cada alumno. 

Ahora bien, para mejorar la calidad de la educación, los países necesitan adoptar propuestas innovadoras. El surgimiento de una nueva disciplina, la neuroeducación, abre las puertas al conocimiento entregado por la biología del cerebro para ser aplicado en la comprensión y elaboración de una mejor educación. Innovar es transformar, es apostar por una educación para el Siglo XXI, por eso es esencial implementar en nuestras aulas nuevos componentes que abran camino a un nuevo modelo de práctica pedagógica, un modelo que considere la armonía entre el cerebro, el aprendizaje y el desarrollo humano.

En conclusión el conocer la estructura  y funcionamiento del cerebro, le da al educador la base para emprender un nuevo estilo de enseñanza - aprendizaje, un nuevo ambiente en el aula , la oportunidad de que el educando aprenda de forma real, significativa y funcional los contenidos programáticos así como lograr un desarrollo integral humano de su alumno.